Estimular de manera consciente y positiva, es una práctica clave si deseas velar, no solo por el óptimo desarrollo físico de tu bebé, sino por su despliegue cognitivo, motor y social.

Es probable que, bien sea de otras mamás o incluso de tu médico de confianza, la afirmación anterior haya aparecido en tu vida desde que eres mamá, ¿Cierto?, y, no es para menos, pues te contamos que las más recientes investigaciones han demostrado el gran impacto que la estimulación temprana tiene en el crecimiento y desarrollo de tu bebé.

Este tema puede llegar a comprender una variedad de consideraciones científicas, estudios y métodos. De forma resumida, podemos decirte que, en los primeros años de vida de tu bebé, su cerebro se ocupa en construir su «sistema de cableado», a través de pequeñas conexiones eléctricas llamadas sinapsis.

Se trata de un periodo intenso de creación de redes, que ocurre una solo una vez en la vida, y es lo que determinará cómo se desenvolverá tu pequeño, tanto de niño como en su vida adulta.

Ahora, es probable que te preguntes:

¿Cómo se relacionan las conexiones cerebrales de mi bebé con la estimulación temprana?

La respuesta es sencilla: La creación de sinapsis abundantes, fuertes y, lo más importante, permanentes, se ve directamente impactada por la cantidad de estímulos a los que esté expuesto tu hijito.

Es aquí donde el maravilloso concepto de la estimulación temprana empieza a tener mayor relevancia, pues de aplicarlo, puedes apoyar activamente con todo tu amor de mamá, en el progreso de competencias claves, lo que se traducirá para tu bebé en:

  • Mejores capacidades creativas y de memoria.
  • Mejor dominio del habla, fluidez y comprensión.
  • Incremento de aptitudes como la empatía y el respeto.
  • Desarrollo de sus cualidades emocionales y sociales, así como de relación con las demás personas.
  • Maximización de su capacidad de aprender.
  • En general, mayor y mejor desenvolvimiento, autonomía e independencia.

Estimula a tu pequeño desde el día 1

Como tus aliados en este maravilloso viaje, te contamos que puedes iniciar la estimulación temprana de tu pequeño desde el día 1, y extenderla hasta los seis años.

¿Qué es lo más importante? Tener en cuenta que tu bebé necesitará diferentes estímulos para cada una de las etapas de su crecimiento, por lo que antes de iniciar cualquier actividad o ejercicio que contribuya con su desarrollo motor o cognitivo, debes identificar la etapa sensoriomotora en la que se encuentra tu chiquito.

Las etapas sensoriomotoras de tu bebé se dividen en los siguientes cinco estadios y, en cada uno de ellos, deberás realizar los ejercicios adecuados.

Etapa de los 0 a los 12 meses

En esta etapa es importante estimular la motricidad gruesa de tu bebé, como por ejemplo que logre mantener la cabeza erguida. El ejercicio más sencillo de realizar lo puedes llevar a cabo acostando a tu retoño boca abajo y mostrarle objetos llamativos para incentivar su interés, esta práctica es mejor conocida como Tummy Time y sus beneficios son múltiples.

Etapa de 1 a 2 años

¡Incrementemos su fuerza! Con algo tan sencillo como jugar a la pelota. Este ejercicio no solo lo ayudará a fortalecerse a nivel muscular, sino que también lo estimulará a desarrollar su capacidad de orientación y coordinación. Siéntate frente a tu bebé, tira la pelota, y haz que la tome y la devuelva a ti.

Etapa de 2 a 3 años

Es la mejor edad para incentivar el desarrollo y crecimiento de tu bebé a nivel cognitivo. Estimula su lenguaje con lecturas de cuentos, si tienen ilustraciones mucho mejor. Haz que las vea y que realice sus propias relaciones con las imágenes, ya verás que será una mágica experiencia para ambos.

Etapa de 3 a 4 años

Estimula su creatividad y motricidad, ¿cómo? Dale muchos colores y hojas, déjalo dibujar a sus anchas.

Tip: Prevé que tu pequeño esté en un sitio en el que no haya mayor inconveniente si termina rayando la mesa, el piso, o las paredes; de igual forma, hoy en día existen múltiples opciones de lápices y colores lavables que pueden ser tu mejor aliado durante esta etapa, así puedes permitirle, disciplinadamente, llenar tu mundo de color.

Etapa desde los 4 a los 6 años

Es el mejor momento para estimular su equilibrio y llevar su coordinación al siguiente nivel. Invítalo a bailar con sus canciones favoritas y ¡ponlo a mover su cuerpito!

En general, existe una gran variedad de juegos, juguetes, ejercicios y actividades que puedes poner en práctica cuando de estimular a tu chiquito, desde el primer día, se trata; solo recuerda que la estimulación temprana no debe ser motivo de preocupación, pues, como ya habrás notado, la misma comprende actividades que son en general bastante sencillas, y que puedes realizar en casa.

No necesitas clínicas especializadas o utilizar costosos métodos, los cuales también son válidos de ser tu elección. Lo más importante, es que tengas paciencia, constancia y, sobre todo, que disfrutes cada una de las etapas de tu pequeño ¡Muchos éxitos en este nuevo desafío!…

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