Tu bebé ha llegado, te ha cambiado la vida y muchas cosas que antes eran más sencillas de gestionar en tu rutina, puede que ahora hayan pasado a un segundo plano, o incluso ahora sean hasta una interrogante; como es el caso de algo tan básico, pero fundamental como tu alimentación. Te has llegado a preguntar: Después de dar a luz, qué puedo comer.
Como queremos estar contigo y apoyarte en cada fase de esta maravillosa etapa, hemos recopilado un par de recomendaciones, que esperamos que te sirvan de guía, para que puedas llevar una dieta equilibrada y saludable durante tu etapa de posparto, también conocido como el puerperio, mientras le das lo mejor de ti a tu pequeño.
¿Qué alimentos puedo comer después de dar a luz?
Proteínas y carnes magras
El pescado es una de las proteínas más favorables para ti después de dar a luz. Este alimento es alto en ácidos grasos y omega-3, justo lo que necesitas para que tu organismo se regenere con total eficiencia.
Lo mismo podemos decir de las carnes magras, que tienen un alto contenido de proteína, calcio, hierro, magnesio y sodio. Al mismo tiempo, estos cortes están libres de azúcar, lo cual beneficiará en gran medida a tu organismo.
Para hacer una lista de carnes magras, te recomendamos incluir lomo de cerdo, cordero, lomo y falda de res. Además, todas son favorables para contrarrestar los efectos de la mastitis, que podrías sufrir si eres una mamá en periodo de lactancia.
Verduras y vegetales
Si tienes dudas y te preguntas qué comer después de una cesárea, de complemento y guarnición, considera acompañar tu pescado o carne magra con cualquier tipo de vegetales verdes sin almidón, entre los que puedes incluir: espárragos, acelga, coles de bruselas, pepino y alcachofa.
También verduras como la lechuga (normal o romana), rúcula, berro y espinaca, que son fuentes elementales de vitamina C y K, con las que podrás absorber el hierro, fortalecer tus huesos y mantener una buena circulación en la sangre.
Cereales integrales, frutas y grasas saludables
Los cereales integrales no pueden faltar en tu dieta. El arroz integral, la quinoa, la avena y el pan de centeno son excelentes opciones para variar entre tus comidas, mientras vives la experiencia de ser mamá acogiendo al nuevo integrante de la familia.
Las grasas saludables te ofrecen otra alternativa muy deliciosa. En esta categoría entra el aceite de oliva, el aguacate y los frutos secos como almendras, pistachos, nueces y avellanas, que fácilmente puedes utilizar como un snack para bajar tus niveles de ansiedad en momentos críticos.
Si eres amante de las frutas, te tenemos la lista de las más recomendadas en la etapa posparto: melón, naranja, mandarina y toronja, que también puedes combinar con otras verduras y vegetales para prepararte un delicioso y nutritivo smoothie.
Lo más importante es que incluyas siempre en tus comidas una distribución apropiada de proteína, carbohidratos y grasas saludables. El valor nutricional debe ser alto para que te sea posible cumplir con todas las exigencias que tu cuerpo te pedirá en esta maravillosa etapa.
Por último, mantente siempre muy bien hidratada, bebe mucha agua, y considera añadir una rutina de ejercicios a tu día a día. Mantenerte en forma combinando una buena alimentación con una disciplina de entrenamiento te hará sentirte como una mamá súper poderosa y llena de vida, lista para darlo todo por su pequeño y su familia.
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